BRITNEY SPEARS SE NIEGA A VOLVER A LOS ESCENARIOS SI SU PADRE SIGUE GESTIONANDO SU CARRERA

La cantante ha anunciado que no volverá a actuar hasta que su padre, James Spears, deje de ser su tutor legal. Esta declaración viene a raíz de que esta semana, un tribunal en Los Ángeles, rechazase la demanda impuesta contra su progenitor, que ejerce una tutela sobre la cantante y su patrimonio desde hace 12 años.

Britney Spears a sus 38 años, ha decidido tomar las riendas de su vida y su carrera profesional tras un parón indefinido en su carrera. Sin embargo las circunstancias le vuelven a jugar una mala pasada después de que, Brenda Penny, la jueza del tribunal estadounidense, haya rechazado su demanda impuesta el pasado mes de julio, después de que James Spears despidiera al gestor que Britney había elegido sin avisarla y lo sustituyera por otro nuevo. El abogado de la artista ha declarado que Britney está asustada: ¨tiene miedo de su padre y no volverá a actuar si él sigue a cargo de su carrera¨, decía.

Todo comenzó cuando en 2008, James Spears asumió la tutela de su hija pasando a tener todo el control monetario de su vida. Además, desde entonces, es el encargado de manejar sus publicaciones en las redes, o de controlar las entrevistas que lleva a cabo, entre otras acciones.

Por esa época la cantante de ¨Baby One More Time¨, no atravesaba un buen momento: drogas, alcohol y estupefacientes, el divorcio con su ex-marido Kevin Federline, o la pérdida de la custodia de sus dos hijos, hicieron que su padre le ayudase no solo con su salud mental, también con sus bienes. Sin embargo, 12 años después tanto Britney como su madre Lynne, ex- mujer de James, instan a la destitución de James como tutor legal de forma pública, ya que esta lucha lleva más de una década en los tribunales.

La abogada de James Spears, Vivian Thoreen, argumentó que bajo la tutela de su cliente, el patrimonio neto de la artista ha salido de la deuda para llegar a los 60 millones de dólares. No obstante, Brenda Penny, la jueza que lleva el caso asegura que la decisión no es definitiva, pues no descarta seguir con el caso si así lo requiere.

No se sabe que pasará, pero de momento la artista cuenta con una campaña que la respalda en las redes: #FreeBritney es el nombre del movimiento que aboga por su libertad, tras salir derrotada por las cifras millonarias que ha conseguido su padre en las cuentas que ella dejó hundidas.