EL SUPREMO DICE QUE LAS COMUNIDADES NO PUEDEN DECRETAR EL TOQUE DE QUEDA

Calle vacía siendo patrullada por el toque de queda del estado de alarma. La Vanguardia

El Tribunal Supremo ha dictado sentencia este jueves respecto al controvertido toque de queda. Así, el alto tribunal estima que las comunidades autónomas no tienen competencia jurídica suficiente para recortar los derechos fundamentales de movilidad a la población. Esta sentencia llega tras la decisión de la Fiscalía de Baleares de llevar al tribunal la decisión del gobierno de las islas de limitar la movilidad nocturna y el número de personas que se pueden reunir.

La sentencia que ha dictado el Tribunal Supremo señala que la ley en la cual se amparaban las comunidades para dictar el toque de queda nocturno no es válida para este supuesto. Así, la sentencia argumenta que la Ley de Medidas Especiales de Salud Pública de 1986 sirve para restringir derechos fundamentales pero no de una manera generalizada ni prolongada en el tiempo. Además, de no ser imprescindibles ni proporcionales dichas restricciones en la comunidad teniendo en cuenta la situación epidemiológica de las islas, según argumenta el tribunal.

La justicia ya había tumbado los toques de queda en País Vasco y Canarias donde los tribunales superiores de justicia de dichos territorios dictaron que no tenían las competencias jurídicas suficientes como para restringir la movilidad nocturna. Sin embargo, el Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares dictaminó que el Gobierno autonómica podía restringir la movilidad lo que motivó que la Fiscalía interpusiese un recurso ante el alto tribunal. De esta forma, no caben más recursos judiciales.

Actualmente, solo dos territorios mantenían el toque de queda nocturno para su población, las Islas Baleares y la Comunidad Valenciana. Sin embargo, tras esta sentencia se finalizará la medidas en los dos territorios, a pesar de que la Comunidad Valenciana ya lo ha levantado a partir del lunes que viene. De esta forma, ninguna comunidad estará sujeta a dichas restricciones.

Mónica Giner González