¿Necesito un seguro para mi oficina?

Cuando pensamos en adquirir un seguro para nuestra oficina, talvez solo pensamos en la posibilidad de un incendio o talvez un robo de los elementos que usamos en ella. Pues bien, no alcanzamos a dimensionar la cantidad de peligros que podríamos enfrentar.

Por esto, el concepto de seguro multirriesgo para comercios y oficinas cobra cada vez más sentido. Este seguro es una especie de póliza a la carta o personalizada. Cubre aquellos riesgos a los que el empresario está expuesto por la actividad de su negocio y que pueden no ser los mismos que los inherentes a otros.

Por tanto, una póliza multirriesgo no es un simple seguro contra incendios que se puedan producir en tu comercio u oficina, sino que va mucho más allá ofreciéndo una cobertura «a la carta» dependiendo de las necesidades más específicas de tu actividad profesional.

¿Qué cubre un seguro multirriesgo para oficinas?

El seguro de un local comercial o de una oficina debe cubrir obligatoriamente los daños ocasionados en el continente (las propias instalaciones del negocio) y en el contenido (las cosas que hay dentro), así como la responsabilidad civil del empresario.

De forma generalizada, podemos hacer referencia a todas estas coberturas. Las que suelen incluir todos los seguros multirriesgo, aunque permiten mucho margen de personalización para cada cliente, son:

1. Consecuencias derivadas de fallos eléctricos. Una subida de tensión que no haya sido originada por tu propia actividad puede estropear los ordenadores, los TPV y demás dispositivos electrónicos de tu oficina o tienda.
2. Daños en el patrimonio empresarial originados por terceros. Este sería el caso de un vándalo que arroja una botella incendiaria a través de una de tus ventanas o de los desperfectos ocasionados por un accidente de tráfico mientras el vehículo profesional del negocio está parado en la vía. El único requisito es que no sean originados por miembros de la empresa.
3. Acciones que repercutan negativamente en tu cuenta de resultados. Esta cobertura hace referencia a los robos realizados por terceros o por tu propio empleado, así como a los perjuicios económicos derivados de sus actos.
4. Desperfectos en mercancías. Siempre que tengan lugar durante el proceso de transporte, almacenamiento en stock o reparto y solo si se producen por fenómenos incontrolables. Un ejemplo sería el de una filtración en el local durante un día de lluvias intensas.
5. Reparaciones de equipos informáticos. Generalmente, esta cobertura se asocia a un servicio de asistencia 24 horas. Así los ordenadores de la oficina o el local comercial gracias a los cuales pueden ejercer tu negocio siempre estarán operativos.
6. Defensa legal. En caso de tener que hacer frente a un proceso judicial con motivo de una demanda de responsabilidad civil, el seguro cubrirá los costes y te proporcionará un abogado.
7. Responsabilidad civil a terceros. Cubrirá el pago de indemnizaciones hasta una cantidad determinada y pactada de antemano. Los beneficiarios serán aquellos a los que tu propia actividad profesional les ha ocasionado un perjuicio económico o un daño personal o material.

 Los seguros multirriesgo que ofrecen las aseguradoras tienen un precio base y unas coberturas mínimas. A partir de ahí, su valor se incrementa en función de aquellas que necesites adicionalmente por la actividad específica de tu negocio.TXTWORD