EL SORPRENDENTE DISEÑO DE LORENZO CAPRILE QUE NO ES ROPA

Lorenzo Caprile es el diseñador preferido por la casa real ya que sus diseños han deleitado tanto a la reina Letizia como a las infantas. También ha conquistado a Victoria Federica, quien se está abriendo hueco en el mundo de la moda. Pero no solo es el favorito de la Casa Real sino que el modista ha confeccionado increíbles vestidos que hemos visto en las alfombras rojas.

Gracias a su larga trayectoria, Caprile es uno de los diseñadores más relevantes de nuestro país. De hecho, su trabajo le ha llevado a dar el salto a la televisión, donde ha sido jurado del conocido programa ‘Maestros de la Costura’, que se emite en TVE. Cada martes disfrutamos viendo este ‘reality’ de moda en el que también aprendemos de la mano de este diseñador y de María Escote y Alejandro Gómez Palomo (Palomo Spain), pero también de los concursantes. El último programa está en el centro del foco debido a que dos concursantes, Caterina e Isabel, han rechazado realizar una prueba en la que se utilizan pieles.

Más allá de este concurso, los miembros del jurado siguen con sus carreras. Lorezo Caprile se ha embarcado en un nuevo proyecto que no ha dejado indiferente a nadie. Os adelantamos que es el creador de un diseño artesano y sostenible, pero que no se trata de una prenda de ropa. Caprile se ha encargado de diseñar una botella y un estuche de una marca de whisky, concretamente DYC.

La marca ha lanzado una edición limitada llamada ‘Grandes Maestros’. Desde la casa segoviana han querido contar con grandes maestros, referentes,  en distintos ámbitos para crear 70 botellas únicas de DYC 20. Maestros que abogan por los valores de artesanía, exclusividad, sostenibilidad y orgullo local.

Lorenzo Caprile ha diseñado una botella y un estuche que «rinde homenaje a la belleza de madurar en un entorno único y excepcional, inspirándose en la naturaleza del entorno segoviano», aseguran desde la marca.

Cada una de las 70 botellas se ha creado con los cristales de la Real Fábrica de Cristales de La Granja. Desde la casa explican: «Su proceso de elaboración artesanal mediante vidrio soplado, el uso de un molde exclusivo y la calidad del cristal manualmente tallado convierten esta edición no solo en la mejor representación de los pilares de innovación». «La calidad de la materia prima, la calidad del entorno y el orgullo del saber hacer español, sino que además este proyecto supone toda una reivindicación del poder de la creación de los maestros locales».