LA CHICA YEYÉ ESTÁ DE VUELTA ESTE 2022

Las tendencias confirman el regreso de una de las décadas más ecléctica y significativas del s.XX.

Las bases del estilo de los 60 se integran en un imaginario hiper ecléctico que está de vuelta. Esta inspiración sesentera es otra referencia que viene a vestir la época de la pospandemia, con la mayoría de connotaciones que ya definieron el periodo. Así que, vamos a analizar todas las tendencias que vuelven.

Las minifaldas sin duda volvieron para quedarse y cada vez más y más cortas. No hay que culpar solo a los 2000 sino muchos antes, en los 60 el diseñador Chester Weinburg ya estaba haciendo adaptaciones de las minis para un público más maduro. Fue una ideaza que acogió a la perfección ese público.

En la misma línea que las minifaldas y los trajes que integran, el vestido propio de los 60 también está de vuelta. Se trataba de una prenda de corte recto, que se relacionaba con el canon de belleza andrógino que definieron modelos como Twiggy. El objetivo de este vestido era enseñar prenda, aunque también se llamaba babydoll, porque se podía combinar con merceditas y unas botas.

Mary Quant conquistó al público femenino de los 60, ya que confesó en esa época que las mujeres querían llevar ropa que les permitiera correr detrás del bus. Y es que claro, esa obsesión por el movimiento se convirtió en el el símbolo de la emancipación de la mujer, la pildora y el rock and roll. Así que de esto, surgió la minifalda, pero esta vez desde una perspectiva más naïf.

Finalmente, el pecho se volvió como la principal obsesión de la moda. La exposición del cuerpo femenino, la desnudez, eran ideas que primaban en la moda. Así que, para representar esto tendremos los famosos cut-outs extremos, que nos confirman que el regreso a la intimidad y al sexo.

¿Qué os parecen estas tendencias? ¿Las llevaríais?