- INFO@EDMRADIO.ES
- EDM RADIO
- EDMRADIOOFICIAL
- EDMRadioOficial
- EDM RADIO
Listeners:
Top listeners:
EDM Radio Somos Jóvenes
EDM Radio Sevilla Somos Jovenes!!!
Entrevista Erick Galan
Del 15 Al 1 – Sábado 6 de Marzo del 2021 EDMRADIO
Los pies son una de las zonas más vulnerables del cuerpo. Su correcto cuidado, no sólo puede ayudarnos a prevenir lesiones de espalda o musculares, también puede evitar la aparición de lesiones superficiales originadas por presión. Mantener nuestros pies en buen estado resulta especialmente importante si nos encontramos expuestos a situaciones, hábitos o agentes externos potencialmente peligrosos. Uno de los recursos más efectivos tanto en el campo de la fisioterapia como el de la podología son los apósitos y dispositivos elaborados a partir de hidrogel.
Utilizarlos de forma regular puede contribuir positivamente en el mantenimiento y cuidado de los pies. En el mercado es posible acceder a modelos elaborados con diferentes materiales y diseños. Puedes encontrar desde taloneras, hasta calcetines o almohadillas.
Estas plantillas para pies son una especie de láminas de dimensiones reducidas que generalmente están elaboradas a partir de silicona o gel y que se integran en la cara interna del calzado, generalmente, en el talón. Sus aplicaciones son bastante diversas. Pueden emplearse como un remedio para mejorar la comodidad a la hora de llevar un determinado calzado, evitar rozaduras, úlceras o, por ejemplo, mitigar desniveles o diferencias de longitud que puedan existir entre las piernas. Algunos de sus principales beneficios son:
Atenuación de los dolores plantares.
Prevención de lesiones dérmicas y musculares.
Incremento de la sensación de confort.
Facilitación de los procesos de transpiración, especialmente en el caso de aquellas personas que por circunstancias laborales deben permanecer largos períodos de tiempo en pie de forma regular.
Minimización de los efectos generados por pies planos.
Alivio de dolores y tensiones localizados en pies, piernas y espalda.
Las úlceras de presión o úlceras de decúbito son un tipo de lesión que puede originarse tanto en la piel como en el tejido subyacente. Se producen cuando el suministro de sangre se ve bloqueado en un área del pie específica. Generalmente, son el resultado de una presión superficial prolongada en el tiempo (de ahí su nombre). La principal consecuencia que se deriva de ello es la muerte paulatina de la piel que, poco a poco, se va manifestando en forma de orificio o cráter superficial. Estas llagas o úlceras presentan un cuadro sintomatológico relativamente fácil de identificar. Algunos de los indicios más comunes son:
Piel agrietada, escamosa o desgarrada.
La presencia de una úlcera abierta a nivel superficial o en el tejido ubicado bajo la piel.
Puntos de presión excesivamente sensibles o que incluso pueden ir asociados a sensaciones de olor.
Zonas de color rojo en la piel que no desaparecen una vez que se ha retirado la presión. Generalmente, se trata de un indicio que revela que la piel se agrietará próximamente o comenzará a morir.
No tratarlas puede derivar en infecciones y en problemas colaterales de mayor gravedad que pueden interferir significativamente en nuestra calidad de vida.
En realidad, se trata de un problema bastante común. Las úlceras de presión son uno de los problemas de salud más comunes. Por ejemplo, en Estados Unidos, las úlceras de presión se diagnosticaron en más de 500.000 estancias hospitalarias sólo en 2016.
Prevenir y paliar la aparición de lesiones por presión en los pies
Dar prioridad a los calzados holgados y cómodos.
Proteger los puntos de presión a partir de almohadillas para prevenir la aparición de nuevas úlceras o paliar las consecuencias de las que ya han aparecido.
Incrementar el consumo de agua.
Limpiar de forma periódica la úlcera abierta con agua y con especial cuidado para, a continuación cubrirla con un vendaje especial.
Aplicar ungüentos, productos o cremas específicamente formulados para tratar lesiones por presión en los pies.
Frente a la silicona, el gel polímero posee una composición rica en agua. Optar por apósitos, plantillas o taloneras elaboradas a base de hidrogel puede contribuir a acelerar los procesos de cicatrización. Al mantener las úlceras húmedas e impedir que se sequen, las heridas pueden cicatrizar de una forma más ágil y en definitiva favorecen la prevención de lesiones por presión.
Por ejemplo, esta almohadilla para úlceras en el pie está elaborada con gel polímero. Se trata de un dispositivo médico clase I que está específicamente desarrollado para prevenir los daños en los tejidos blandos originados por picos de presión, fricción o presión continuada en el tiempo. Estos apósitos están orientados a aquellas úlceras de grado 1 que no presentan ninguna abertura, es decir, que no son una herida abierta. No contienen ningún área adhesiva por lo que pueden deslizarse fácilmente. Además, gracias a su composición no retienen olores indeseados o fluidos.
Si la lesión se sitúa en el talón, quizá lo más aconsejable sería optar por una talonera de gel para úlceras. En el catálogo de Podología Fresco puedes encontrar un modelo adaptado a la forma del talón (aunque también puede utilizarse para el codo) y que reúne las mismas características: Está orientado a tratar las úlceras de grado 1 no abiertas, no posee una superficie adhesiva y no retiene fluidos o hedores. Además, para proporcionar garantías de protección a todo el pie, también puedes recurrir a este calcetín de gel antiescaras lavable y reutilizable.
Escrito por EDMRADIO
© EDM RADIO 2003 -2024
Comentarios de las entradas (0)